Me va mal en el trabajo, me pagan poco, me tratan mal, no me suben el sueldo, no me dan capacitación, no estoy listo, nada sale como espero… ¿Sábes que tienen en común todas esas frases? Quienes las dicen siempre quieren mostrarse como pobres víctimas, que nada puede hacer para cambiar su situación, o eso es lo que ellos creen. Porque en realidad solo son víctimas de sus malos hábitos y de su propia mentalidad perdedora.
Dile adiós a tu mentalidad empobrecedora eliminando estos malos hábitos de tu vida.
El mal hábito de perder el tiempo lamentándose
Lamentarse es una pérdida importante de tu tiempo, no te aporta nada, porque te estás centrando en el problema en lugar de enfocarte en encontrar la solución.
8- El mal hábito de culpar a otros
Somos responsables por nuestras propias vidas y debemos dejar de pensar que los demás tienen responsabilidad por nuestros fracasos.
7- El mal hábito de tener miedo al cambio
¿Qué es lo peor que puede pasar? La cave está en calcular el riesgo que corres, y si los beneficios son mayores pues adelante. El cambio siempre conlleva a oportunidades
5- El mal hábito de dejar todo para después
No a la procrastinación. No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy
4- El mal hábito de esperar el mejor momento
El momento perfecto es ahora, así que si arrancas de inmediato llegarás mucho más rápido a la meta. No es necesario que estén todas las condiciones, crea tú mismo las condiciones.
3- El mal hábito de envidiar el éxito ajeno
La envidia es veneno para tu cerebro porque te centras en lo que otros han conseguido en vez de centrarte en lo que puedes conseguir tú. Enfócate en tus propias metas en vez de la de los demás.
2- El mal hábito de creer que el mudo nos debe todo
La sociedad nos ha malcriado, haciéndonos creer que tenemos derecho a todo por el mero hecho de existir. ¿Pero qué hacemos para mejorar esta sociedad? Los derechos conllevan a obligaciones, debemos esforzarnos y trabajar para ser de este mundo un lugar mejor.
1- El mal hábito de actuar por impulso
Nuestro sentido común falla cuando actuamos por impulso desde la ira o la euforia. Se una persona más inteligente de lo que eras, sigue tus instintos, pero con los pensamientos en calma.
No esperes ver un cambio si tú mismo no lo haces: Mira estos pulóveres solo para personas ganadoras.